domingo, 18 de mayo de 2025

Esto no estaba en mi libro de historia de la Química (Alejandro Navarro)

Un regalo de cumpleaños o así que a veces le cae a uno. Que uno es científico y lee mucho, así que de vez en cuando caen propuestas que aúnan ambas tendencias.

Título: Eso no estaba en mi libro de historia de la química

Autor: Alejandro Navarro

“¿Quiénes fueron los pioneros en las guerras químicas? ¿Cuáles han sido los engaños más increíbles que se han perpetrado con la química como instrumento? ¿Conoces la receta para fabricar oro? ¿Y el origen de las conservas? ¿Cuál es el poder de las «balas mágicas»? ¿Cómo ha afectado la química a la producción de alimentos? ¿Por qué se usa el acero de los pecios de la Primera Guerra Mundial para fabricar contadores Geiger? El Arsénico y el polonio son asesinos despiadados; pero no solo para el mal se ha usado la química: vitaminas, vacunas, medicamentos, mejoras en los cultivos… han ayudado a la humanidad durante toda su historia.

Alejandro Navarro nos trae una obra fascinante y divertida, cargada de curiosidades e historias con mucha química. Comprobaremos cómo a lo largo de la historia hemos utilizado esta ciencia para el bien y para el mal; para hacer la guerra, enriquecernos a costa del prójimo —borrándolo del mapa cuando ha sido preciso—; pero también para sanar y alimentar una población siempre creciente, para un sinfín de utilidades que hacen nuestra vida más segura y agradable. Por sus páginas recorreremos estas crónicas de la mano de célebres químicos, pero también de gobernantes, militares o de embaucadores de toda índole, todos ellos han protagonizado una de las mayores aventuras en la que nos hemos embarcado, la fabulosa historia de la química.”

En este caso, tenemos un libro a medio camino entre el ensayo y la divulgación sobre las diversas aplicaciones directas que tiene la Química en la sociedad. Así, se muestran avances útiles (o al menos importantes) que han impactado claramente en nuestro mundo: La detección de las vitaminas y su importancia, el abono para mejorar cultivos, medicamentos, gas mostaza, etc. Se agradece que en muchos casos no vaya hacia el ejemplo más obvio, sabiendo sorprender al más avezado y, quizás, captando la atención al neófito.

Como suele ocurrir en estos casos, cuando leo un libro de divulgación sobre un tema que conozco, me encuentro con que apenas raspa en la superficie de los temas. Vale que es mi trabajo, pero me haría ilusión encontrar más profundidad. No obstante, entiendo que entonces estás perdiendo al 95% de posibles lectores, y claro, tampoco es el plan.

Mi principal queja – que tampoco es mucha – radica en el esfuerzo que hace para remarcar que los quimifobos no son otra cosa que ignorantes con prejuicios, y que natural no es sinónimo de bueno. El autor le dedica tantas líneas que se me hace cansino. Que estoy de acuerdo con él, ¡no hace falta que intente convencerme! (Otra vez, no soy el lector objetivo / típico de este libro y se nota ^^).

Así, tenemos un libro muy bienintencionado y sencillo que te permitirá lucirte en la categorái concreta del Trivial. Fácil de leer y bien estructurado. Que es para lo que existen este tipo de libros, claro.

 

Nota: 5

Nota goodreads: 4.05/5 

viernes, 16 de mayo de 2025

Daredevil

Ahora que estos días hemos tenido por aquí la serie de Marvel, pongámonos a recordar la película que tanta fama (ejem) cosechó en su momento.

Así, tenemos a Daredevil, el abogado ciego de día, que de noche se dedica a ponerse la máscara y castigar a aquellos que escapan de la justicia gracias a su oído superdesarrollado y sus habilidades marciales. Esto causará las iras del jefe de la mafia local (Kingpin), que contratará a dos letales asesinos para acabar con él. O algo así.

Cuando yo vi la película en el cine (si, fui de los locos que acudieron a verla), apenas conocía al personaje de haber salido algunas veces de secundario en historias Spiderman, así que no sabía nada de él. Lo que me encontré fue un engendro de película que no tenía sentido, con un “bueno” que no dejaba de acosar mujeres, unos personajes que parecían cada uno sacado de una película diferente y una mezcla de imaginerías que no se entendían. No entraré en lo peregrina de la historia, que abarcaba más de lo que debería en un batiburrillo muy raro.

Ahora, al volverla a ver, conocer mucho más al personaje y tener un bagaje mayor de películas a mis espaldas, pues me he encontrado con una película chunga pero… no TAN chunga. Si bien la tenía por una blasfemia al personaje, en este repaso veo que hay cariño y ganas de que las cosas salgan bien. Han cogido elementos muy reconocibles de las tres grandes etapas del personaje y los han metido en danza con total literalidad. Que luego el tono de esas sagas no pegue entre ellas y el director no se haya molestado en adecuar una cosa a la otra es diferente. Los elementos originales están ahí, hay un chorrón de detalles para el friki, se plantan las semillas para tres secuelas… pero se conjugan con unos problemas de ritmo muy grandes, errores groseros de tono y una trama que no sabe muy bien si ser de Frank Miller o Mark Waid y se queda a mitad de todo. Es decir, percibo muchas ganas de que este proyecto salga bien. Otra cosa es que salga, que el director da para lo que da. La cantidad de despropósitos tras las cámaras es bastante grande, pero se trata de la obra más reconocida de su director – aunque parezca mentira, es así – que luego se arrejuntó a Nicholas Cage y nos dio sus Motorista Fantasma. Con un CV como éste, el resultado no es tan sorprendente.

A pesar de los ríos de tinta que han corrido en su contra, Ben Affleck no carga con las culpas del desastre. De él sabemos que es un frikazo que se ha leído todos los cómics del derecho y del revés y estoy seguro de que es la persona a la que más le duele que la película saliera como salió. Le pone ganas, le pone esfuerzo y hace lo que puede por dar vida a un Matt Murdock ligón (y pesado) y torturado (muy de su época) que podría haber salido de casi cualquiera de los grandes cómics. Sin embargo, tiene el problema de que el resto de actores no saben (o no quieren molestarse en saber) dónde están. Colin Farrell (Bullseye) hace aquí uno de los papeles que le granjearon fama de ser uno de los peores actores del momento, lo mismo ocurre con Jennifer Garner, cuya Elektra no está bien escrita ni ella hace un buen trabajo. Sólo hay que ver su presentación que sobrepasa la vergüenza ajena imitando a una Matrix estrenada no hacía tanto. Por lo menos Michael Clarke Duncan hace un Kingpin bien hecho, brutal y aterrador, como debe ser. El aspecto exterior es un poco chocante, pero es verle moverse por la pantalla y ya da el pego.

Por otro lado, debemos destacar también el trabajo de Evanescence, ejemplo perfecto de bandas sonoras que se lo creen mucho más que la película. La de gente que se quedará alucinada al comprobar que algunos de los hits más conocidos de esta banda se estrenaron para esta película. Cancionazas que están muy por encima del metraje.

Daredevil es una película que se hace aburrida. No se decide si quiere ser comedia, drama o thriller, tiene problemas de ritmo y unos diálogos un poco vergonzantes. Por otro lado, se nota que los creadores querían hacer las cosas bien. No tenían ni idea de cómo, pero lo intentan con multitud de guiños y detalles presentados en pantalla de manera similar a la que tuvimos después MCU. Fallando en casi todos los aspectos, sorprende que llegara a tener una secuela de todavía peor calidad. Mis dieces a la banda sonora, por otra parte.

 

Nota: 3

Nota filmaffinity: 4.3


domingo, 11 de mayo de 2025

Casa de muñecas (Henrik Ibsen)

Había oído hablar mucho de la Casa de muñecas de Ibsen como una de las obras fundacionales del feminismo, tanto nombrada como homenajeada en un montón de obras, pero nunca había leído la obra original. Como me ha llegado dentro de la Cesta’13, pues vamos a darle un tiento, que el libro es delgadito.

Título: Casa de muñecas

Autor: Henrik Ibsen

Título original: Et dukkehjem

Traducción: Isidro Maltrana

“Cualquier persona con unas dosis mínimas de sensibilidad literaria y, al mismo tiempo, preocupada por los problemas de la mujer -o mejor aún, por los problemas del ser humano en el mundo imperfecto y repleto de carencias, injusticias y desigualdades que nos ha tocado vivir- no podrá sustraerse al poderoso influjo, al sombro y a un hondo sentimiento de admiración por esta obra, Casa de muñecas, que vio la luz en las postrimerías del pasado siglo (1880). Y por todo lo que esta genial pieza dramática ha significado y significa, por esa galería de arquetipos humanos, de una fuerza y vigor inusuales, encabezada por el principal de ellos, el de Nora, la protagonista, ya arquetipo universal de la literatura dramática de todos los tiempos.”

Bueno, un resumen de contraportada que no dice nada. Será cuestión de poner de nuestra parte. La acción gira en torno a Nora Helma, una mujer de clase relativamente alta de Oslo. Aparentemente, su vida no podía ser mejor: tiene un marido que la adora, un puñado de criados que le cuidan la casa, unos hijos amantísimos no especialmente revoltosos, dineros para sus compras… Pero Nora NO es feliz. ¿Por qué? Porque vive en una casa de muñecas: es una casa bellísima perfectamente equipada, pero es controlada y no tienen ningún poder de decisión; es una casa destinada a que otro (su marido) disfrute y se entretenga con Nora. ¿El dinero? Todo el que quiera, pero siempre pidiéndoselo a su marido. ¿Diversiones? Sin problema, pero siempre con el permiso de su marido. ¿Las vacaciones? Donde él quiera, obviamente. Que sí, que él es buena gente (por suerte) y la quiere mucho, pero el rol que él (y la sociedad) quiere es el que es, algo con lo que Nora no se siente muy a gusto.

Esta metáfora de la visión de Nora de su vida como una casa de muñecas y sus intentos de rebeldía son una muestra de la situación de la mujer en la época (finales del XIX). Ahora es su marido quién dirige su vida, antes fue su padre. Nora no sabe quién (o qué) es, ya que siempre ha sido condicionada por la sociedad para comportarse tal como debe ser una esposa amorosa, es decir, obedecer con discreción los deseos de su marido. El resultado es una mujer que es aparentemente débil y controlable. Sin embargo, las circunstancias provocan que Nora deba guardar un secreto bien gordo, lo que desafiará las normas establecidas y generará un buen montón de problemas.

Escrita en 1879 se trata de una de las primeras obras abiertamente feministas que llegó al gran público. Constituye un hito dentro del desarrollo de heroínas femeninas realmente independientes, rechazando los condicionantes que la sociedad obligaba a aceptar incondicionalmente. En este caso, muestra el destino de las mujeres casadas, en un momento de la historia de Noruega donde no tenían oportunidades razonables para autorrealizarse en un mundo que tenía un papel muy marcado para ellas.

Me resulta especialmente ilustrativo como Nora es incapaz de hacer comprender a su marido de que su percepción de la realidad y lo que desea hacer con su vida es incompatible con la concepción que tiene de ella de una muñeca, que sólo actúa por placer y capricho. A pesar del paso del tiempo, el tratamiento destaca por su verosimilitud, mostrándose realista, sin idealizaciones ni maniqueísmos, especialmente a medida que la “rebelión” de Nora va adquiriendo intensidad.

Hoy en día, hay algunos aspectos que están superados (por suerte) y otros que no (hay que seguir trabajando en ello), pues me he sorprendido al comprobar que muchas de las actitudes de los personajes no son tan lejanas a aquellas que podemos ver hoy día. Un lector que acometa este libro de hace ya 150 años podrá ventilarselo en dos tardecitas mientras se indigna con unos y otros.

Plantea (bien) una situación muy reconocible por todos y deja caer las opciones del momento a la problemática. Entiendo la ruptura que supuso con lo establecido  y, sobretodo, la influencia que pudo tener con las obras que se crearon en los siguientes años, reconociendo guiños y analogías de un montón de libros.

Me gustaría poder ver esta historia en una buena obra de teatro, que es como se ha concebido.

 

Nota: 7

Nota goodreads: 3.75/5 

lunes, 14 de abril de 2025

El Atlético Invisible (Terry Pratchett)

Tenía este libro del Mundodisco por ahí olvidado. Como manera de desconectar de las opos, siempre va bien un dulcecito.

Título: El atlético invisible

Autor: Terry Pratchett

Título original: Unseen United

Traducción: Gabriel Dols Gallardo

“Ante el espectro de drásticos recortes que amenazan con perjudicar a su sosegado y agradable modo de vida, los magos de la Universidad Invisible de Ankh-Morpork se ven obligados a ceder a la voluntad de Vetinari, el tirano benévolo de la ciudad, y reanudar con la tradición futbolera de su venerable institución. Pero cuidado... No solo tendrán que aprender a dominar las impenetrables técnicas del balompié, formar un equipo en condiciones e incluso ganar un partido, sino que también tendrán que hacer todo eso sin recurrir a la magia.

Afortunadamente, cuentan con la ayuda de cuatro trabajadores de la Universidad: Trev, un simpático gamberro que lleva el fútbol en la sangre; Juliet, una hermosísima chica algo pánfila, pero de buen corazón, cuyo debut como modelo revolucionará el mundo de la moda; Glenda, la imprescindible cocinera de noche; y el hacendoso señor Uevo, cuyos orígenes son un misterio para todos, incluso para él mismo. Al acercarse el día del gran partido estas cuatro vidas se verán enredadas y cambiadas para siempre, mientras que el juego que tanto fervor despierta entre sus conciudadanos quedará sutil pero inconfundiblemente transformado.

Otra encantadora novela en clave de humor ambientada en el universo fantástico del Mundodisco. Terry Pratchett vuelve su mirada inconfundiblemente aguda hacia la universal afición por el fútbol y las rivalidades entre individuos de bandos opuestos u orígenes dispares.”

En Mundodisco, Pratchett ha sacado punta, criticado, satirizado y jugado con multitud de aspectos de nuestra sociedad, utilizando la fantasía como punto de apoyo sobre el que expresar su opinión y hacernos reflexionar sobre ello. Como su propio nombre nos puede hacer pensar, en El Atlético Invisible, Prachett se mete con el fútbol. Así, a partir de un relato divertido y satírico con la versión Anhk-Morpock del deporte rey y sus alocados fanáticos, encontramos también un cuento sobre el sentimiento de pertenencia y la manera de soportar el maltrato por ser lo que eres (si, se aprovecha para hablar de racismo), además de un par de paseos tangenciales sobre la vacuidad de los desfiles de moda en la alta costura.

La base del libro es el fútbol, pero la excusa para llegar a ello es quizás de las más flojas como tal de la saga. Dentro de sus excentricidades, la manera en que la Universidad Invisible funda un equipo de fútbol se pasa de frenada y luego el curso del partido no tiene un especial interés. Sin embargo, le sirve muy bien para captar el ambiente irracional del fútbol y sus seguidores, especialmente en todo lo que rodea al deporte sin ser el deporte, la capacidad de identificarse por unos colores y odiar al que viste diferente.

Luego en el partido propiamente dicho tenemos una buena muestra del fino humor del autor, aunque el pobre no es que sepa mucho de fútbol. No es que valga como literatura deportiva (jé) pero te ríes, entendiendo porqué es la cosa más importante de aquellas que no tienen ninguna importancia. Especial mención al tiempo de descuento, como debe haber en un partido y, sobretodo, al glorioso testimonio de cómo nace una religión “en directo” (lo mejor del libro).

En cuanto a los personajes, tenemos cameos de la mayoría de viejos conocidos, como el Bibliotecario, Rincewind, Vimes, etc. Como aquí no pasan de secundarios, podemos ver a estos personajes que queremos tanto “desde afuera”, siguiendo el punto de vista de los protagonistas del libro, que no siempre casan con la imagen que tenemos de ellos. Sin embargo, la acción principal corre a cargo de un puñado de recién llegados.

Destaca Trev, un chaval con buenas intenciones y mal vivir que intenta hacer lo correcto, siempre a la sombra de su padre, una de las personalidades del barrio que desapareció demasiado pronto. Tiene un talento natural para darle patadas al balón, pero no sabe si está muy contento con ser jugador de fútbol que es lo que todo el mundo espera de él. Dentro de su carácter granujilla, intenta seducir a la bellísima Juliet, la chica guapa de rigor que ha tenido la suerte de que su sonrisa ha abierto todas las puertas que ha necesitado. Un poquito pusilánime, se ha ido dejando llevar por la vida, asumiendo que el propio destino la llevará a casarse con Trev. Sin embargo, es descubierta por un empresario de la moda, lo que la lanzará a la fama, provocando que se vea rodeada de buitres que van a por su dinero, viejos ricachones que van a por su cuerpo y guapos modelos que tentarán sus intenciones.

Hay un montón de secundarios que pasan por ahí y allá, de entre los que destacan la cocinera Glenda, una de las personalidades más importantes de la Universidad Invisible, pues es la responsable que la comida llegue a los platos de los magos y estos no piensen en dominar el mundo, matarse los unos a los otros y, bueno, que no piensen básicamente. Por un lado, es una jefa implacable que aterra a sus subordinados, siempre con una frase lapidaria preparada con la que llevar a cabo su trabajo a la perfección. Por el otro, se convierte en la protectora de Juliet, a la que cuida como haría una amantísima abuelita, evitando por todos los medios que se descarríe y ande con malas compañías (como Trev). Finalmente, destacaría al Sr. Uevo, alguien tan especial que mejor le conocéis sin que os de más detalles.

Ankh-Morpork cobra aquí una importancia desmedida, sintiendo como vibra con cada partido y cada resultado. Como suele decirse, se convierte aquí en un personaje más. Cada vez me gustaría más poder visitarla como si de un Dos Flores se tratara, aunque no sé si saldría vivo de ahí. Me encanta este lugar y cada peculiar habitante de la misma.

Quizás el argumento no sea el más redondo, pero sí que se nota la prosa habitual del autor. Los personajes se hacen querer a una velocidad sorprendente y a cada momento encontramos guiños, puñaladitas y chascarrillos que nos sacan una buena sonrisita. Al desarrollo le habría venido bien un par de hervores más, pero es lo que hay. Después de todo, se trata del último libro escrito por el autor antes de su muerte, realizado posteriormente al anuncio de su Alzheimer, por lo que podemos entender que quizás había cierta prisa por acabarlo antes de que la cosa fuera a peor y quedara inconcluso.

Reflexión que me pilló con la guardia baja:

¿Qué significa que una vida “valga la pena”, Sr. Uevo?

Significa que dejas el mundo mejor que cómo lo encontraste.”.

Disfruto enormemente la familiaridad de leer un libro del Mundodisco. A cada vez me deja la sensación de reencontrarme con un viejo amigo al que hace más o menos tiempo que no veo. Quizás se trate de una de sus novelas más flojas, pero eso no quita que se trate de una lectura divertida, que viene ideal para desengrasar de cosas más sesudas.


Nota: 6

Nota goodreads: 3.99/5 

sábado, 12 de abril de 2025

300 - El origen de un Imperio

Tenemos aquí una película que va en un tono similar a la anterior. ¿Qué has visto 300 y te has quedado con las ganas de más espartanos? Aquí viene otra ronda.

Así, volvemos a las Termópilas y los 300 espartanos que detienen a un ejército de millones. ¿Qué ocurre en Grecia mientras Leónidas la está liando parda? Pues que los atenienses tienen la suerte de tener a Temistocles, que parte la pana en los mares y va a dar mucha guerra a los persas. Como base para el argumento, se vuelve a tomar el cómic de Frank Miller como story board. En este caso se trata de XERXES, la continuación de 300, lanzada para celebrar el aniversario de la obra magna.

Así, tenemos una obra muy deudora de 300 que arrastra un problema muy gordo. No es 300. Cualquier comparativa en acción, épica, trascendencia o puesta en escena es inferior a lo que ya vimos. Obviamente, Noam Murro tiene menos sentido de la grandilocuencia gratuita que Zack Snyder y el guión – aunque repita Frank Miller – no puede llegar a las mismas cotas de epicidad. Pasado este envite y aceptando su inferioridad, tenemos una estupenda película de acción que hará bien las delicias de todos aquellos que disfrutaron con los espartanos.

El origen de un imperio no se centra en una única batalla, si no que nos narra a su manera una campaña bélica entera – qué ocurre en los mares griegos durante la invasión persa – por lo que encontramos un desarrollo argumental más elaborado. A ver, tampoco nos flipemos, pero sí que se nota un intento de que conozcamos a los personajes y qué les mueve a hacer lo que hacen. Que sí, que las flipadas marca de la casa están ahí, pero Temístocles o Artemisia tienen más enjundia que Leónidas o Jerjes. También se nota que los actores que los interpretan (Sullivan Stapleton y Eva Green, respectivamente) están más dotados que los de la película original. Sí, Gerard Butler clava más los momentazos de rock&roll, pero en cuanto tiene que hacer un diálogo, se nota que da a para lo que da. Y por su parte Eva Green lleva veinte años haciendo de femme fatale como nadie y no nos cansa en absoluto.

Los años se notan en el aparataje digital, por lo que encontramos una variedad de escenarios mayor y una mayor cantidad de detalles completamente recreados por ordenador. La estética y la composición de planos sigue cuidándose mucho. Por otro lado, hay que reconocer que Murro es inferior estéticamente a Snyder, dejando en muchos momentos la sensación de que “esto ya lo hemos visto antes mejor”. Por ejemplo, el momento en que se pasa del final de 300 al inicio de la película deja claro un “huy, algo ha cambiado”.

Asimismo, pierde también en cuanto a molonidad y ritmo. El origen de un imperio dura menos y cuenta más cosas, por lo que debería entrar más fácil, pero cuando se pone excesivo se queda algo corto y no pone tan a tono como debería. Se nota que falta insipiración en cuanto a máximos se trata. Eso no quita que las escenas sean bien vistosas, que las cabezas vuelen como deben y tengamos la cámara lenta como debemos tenerla. De todos los deudores de los 300 espartanos, ésta es la propuesta que más cerca se ha quedado de la madre de todas las batallas, a pesar de sus defectos. Si lo que quieres es diversión y mata mata, se te ofrece con creces.

Con una propuesta de este estilo, uno pensará que la verosimilitud histórica es cuanto menos relativa. Pero con Miller nunca se sabe y se nota que sí ha estudiado los textos originales de los cuales hace su versión libre. Sorprende como es muy escrupulosa con algunos eventos para a continuación pasar del tema sin despeinarse al adaptar otras cuestiones. Podríamos resumirlo en que lo que nos mola se queda y lo que no, puerta. De la misma manera que el famoso “pues lucharemos a la sombra”, más de uno se quedará de piedra al comprobar las bastardadas que están acreditadas como históricas.

300 – El origen de un Imperio es un engendro entretenido que, obviamente, no llega al nivel de su predecesor. Aporta un buen puñado de escenas de acción con toneladas de sangre, cabezas volando y otras zaranganadas por el estilo. Como dije anteriormente, si te gustó 300, aquí hay un bocadito más. SI no te gustó 300, busca otra cosa que ver ^^.

 

Nota: 6

Nota filmaffinity: 5.4 

miércoles, 9 de abril de 2025

Los siete pecados capitales - Prisioneros del cielo

Se junta otra película facilita que cumple con lo que quiere. Se trata de Prisioneros del cielo, que pertenece al anime de Los siete pecados capitales.

Para los que hayan disfrutado del anime, se sitúa en algún punto entre la temporada 2 y 3, haciendo que los protagonistas vayan a una isla voladora donde la lían parda, aparece un nuevo puñado de malos a los que atizar, completando así una aventurilla más de nuestros “héroes favoritos”.

Este tipo de películas de relleno que gustan tanto en Japón, basadas en los shonen de éxito, tienen un problema común: al estar al margen de la línea temporal, están pensadas para poder saltártela sin perder nada de la trama general de la historia. Así, sabes que no va a ocurrir nada vital o trascendente y responden siempre al mismo esquema, pues los protagonistas suelen tener que enfrentarse a un enemigo muy poderoso del que nadie sabía nada que está al otro lado del mundo (en una de Naruto se van a la Luna, directamente), dando la excusa argumental para tener buenas escenas de acción con un presupuesto (y una animación) más importantes de lo normal y un momentito para que cada personaje se luzca. Prisioneros del cielo es una muestra más de este tipo de películas.

En este caso, una de las cosas buenas que tiene la película es que arregla el mayor problema del anime. Los siete pecados capitales tiene mucha tendencia a divagar dentro de las temporadas, provocando problemas de ritmo y de desarrollo de la trama. Me refiero, que es fácil perder el hilo o aburrirse porque no pasa nada o pasan demasiadas cosas. Aquí tienen que meter toda la trama que normalmente ocuparía una temporada en 2h, así que no tienen tiempo de tonterías y van a lo que van: están los buenos, están los malos y se atizan.

Con ello se consigue una película que está mucho mejor que sus dos temporadas sucesoras (cosa que tampoco era difícil). Se busca una excusa tonta para empezar a arrearse y a gozar de las buenas coreografías, ayudadas por un presupuesto mayor que el habitual en el anime semanal. Además se las arreglan para dar una pelea chula a cada personaje principal, aumentando en mucho la molabilidad del conjunto.

Obviamente, no vamos a tener ningún desarrollo de personajes ni se van a molestar en presentarlos. Se da por supuesto que los conoces y estamos en un relleno, así que nada de la historia general debe cambiar. Lo mismo ocurre con la inexistente trascendencia de la trama. Los protagonistas han ido a un lugar donde nunca habían estado ni tampoco habían nombrado, al que no van a regresar y del que no van a tener  memoria de haber ido.

Prisioneros del cielo cumple a la hora de ser un relleno entretenido, que ya es más que muchas cosas del estilo. ¿Te gusta la serie y quieres más? Aquí hay un bocadito extra. ¿No te gusta o no conoces la serie? Busca otro entretenimiento.

 

Nota: 5

Nota filmaffinity: 5.8 

lunes, 7 de abril de 2025

La ciudad perdida

Hoy traigo una película chorra vista en un viaje de AVE. No diré que es buena, pero sí que me ha entretenido.

El argumento es inesperadamente enrevesado. Sandra Bullock interpreta a una escritora de éxito de novelas románticas de aventuras, cogiendo a Indiana Jones y metiéndole spicy a tope, pero cuya franquicia empieza a estar en decadencia y necesita de nuevos estímulos. Se halla estrenando su última novela, en compañía del tio bueno de turno (Channing Tatum) que se ha encargado de hacer de modelo en las portadas del libro y suspira por encarnar al personaje cuando se hagan las películas. Le pone voluntad, pero es más tonto que un zapato. Y hete aquí que un malvado multimillonario no muy pegado a la realidad (Daniel Radcliffe) está convencido de que los relatos acaecidos en las novelas son reales, así que secuestra a ambos para que les lleve al tesoro escondido de la Ciudad Perdida, sobre la que gira su última novela y situada en alguna isla del Caribe. Channing Tatum verá en estos sucesos su momento para dejar de ser una portada de revista y convertirse en un héroe de verdad.

Con todo este trebejo, lo que disfrutamos es de una chorradita de aventuras que recuerda mucho a Tras el corazón verde, pero puesta al día. Sin tanta mala leche como La Momia, simplemente buscando entretener con una propuesta inofensiva y simpática. Así, tenemos un puñado de aventuras, con toquecitos de ación de comedia romántica, sin complicarse la vida ni tener alardes innecesarios.

A ello ayuda la inesperada buena química de todo el elenco actoral. Sandra Bullock da el pego como MILF tontaina, Channing Tatum clava el papel de tontaina bienintencionado, lo que provoca que funcionen bien como pareja protagonista. Por su parte, el malo zumbadísimo de Daniel Radcliffe está en la onda de personajes excéntricos que gusta de hacer, recordando mucho al Primer Ministro de los EEUU sobrado de ketamina que tenemos estos días. Y bueno, no podemos olvidarnos de un Brad Pitt muy autoparódico que goza de los mejores chistes de la película en un personaje que se mete demasiado adentro de la aventura. Está claro que todos se lo han pasado en grande disfrutando de un rodaje de tres meses en una isla tropical.

El guión no es nada del otro mundo ni sorprende en exceso. Avanza por caminos trillados, pero cumple sin ofender. Quizás no tiene nada de especial, pero tampoco tiene nada de malo dando unas aventurillas agradables sin exigencias. Se molesta incluso en tener un par de chistes ingeniosos derivados de los referentes del género que hace gracia reconocer. Asimismo, todo el gag de la maleta de ruedecillas me provocó buenas carcajadas.

Y es que tampoco tiene mucho que contar. Una película de aventuras agradable, que sabe de sus limitaciones sin complicarse la vida y tiene a un puñado de actores que sostienen la película sin dificultad a base de carisma. Da 100 minutitos de inofensiva diversión sin nada en especial que destacar.


Nota: 5

Nota filmaffinity: 5.0